– ¡Enrique! ¿Qué tal os fue hoy? Cuéntamelo todo.
– Macho, estoy cansadísimo… Por la mañana llegamos a los cuarteles y lo primero q hicimos fue repasar las conclusiones a las que habíamos llegado el dia anterior, y que habían desembocado en la creación de los parametros de medida del espacio urbano. Repartimos unas fichas tipo para el muestreo y la toma de datos y desarrollamos una estrategia: Mínimo 10 entrevistas a las personas que encontráramos en cada pokeparada. Las entrevistas trataron sobre el espacio que las rodea, sus condiciones espaciales, los servicios disponibles, etc.
– Dispersamos al personal por las zonas más interesantes de aranjuez y les dimos un par de horas A la vuelta hicimos una puesta en común sobre qué les había contado la gente y cómo se viven los espacios de Aranjuez. Aparte de información útil, al personal le ha llamado la atención que no siempre la gente les entendía las preguntas: tenían q hablar un lenguaje más de calle.
– Lo normal, ¿no?
– Si, claro, pero cuando eres estudiante hay que salir a la calle a comprobarlo. Establecer un vínculo con nuestros co-ciudadanos no es algo tan natural cuando ya estás metido en la academia. ¡Hay que ejercitarse!
– Otra cosa es que la gente, una vez le preguntas, tiende a contarte largo y tendido lo que piensa sobre las cosas. La conversación fluye. Con eso concluimos, mañana evaluación de datos y análisis. Mañana vamos a empezar a trabajar a fondo sobre las pokeparadas y cómo podemos intervenirlas mediante arquitecturas temporales, acciones… Lo que salga, ¡pero que se haga y se pruebe! ¿Como lo ves?
– ¡Guay! MolarÍa haber tenido algo de eso grabado.
– Ya…
– Y rayos láser.
– Láser. Siempre.
Sin duda un tema de actualidad frenética, jaja.